viernes, 20 de septiembre de 2013

Caín y Abel


CAÍN Y ABEL   Díptico. Lápiz sobre papel 70x48 cm.

El libreto de la ópera “La Flauta Mágica” adquirió entre otras una significación simbólica vinculada a los principios masónicos defendidos por Mozart, a pesar de que las prácticas masónicas eran prohibidas por entonces en Austria. Se pueden encontrar algunos elementos de la logia dentro de la obra:
§  La alusión al cambio de roles entre “buenos y malos” De tal forma que si en un principio se podía intuir la existencia de un malvado personaje que había raptado a una princesa (tema manido en las óperas barrocas), en el transcurso de la acción nos percatamos de que Sarastro (sobre el que pesan una serie de rumores) es el “bueno” mientras que la reina es la malvada. Situación extrapolable a la consideración que tiene la sociedad de la masonería, ya que a pesar de que existe un sinfín de rumores que la satanizan, un acercamiento a ella nos conduciría a la verdad, en opinión del compositor.
El bien y el mal han coexistido desde que el hombre tiene conciencia, de ahí el título Caín y Abel. Muchas veces asociamos el mal a lo desconocido, a todo aquello que no se asemeja a nosotros, pero… ¿Qué es el bien y el mal?

No hay comentarios:

Publicar un comentario